23/8/06

Plaza Alta de Badajoz









Plaza Alta, abasto bullicioso,
orgullo de la fiel Espantaperros,
mercado centenario en esos cerros
con muros de bastión presuntuoso.

Brotaron de tus cuerdas alegrías
y tientos en caricias de bordón,
tus rumbas fueron ritmos de pasión
en noches de compás y bulerías.

Y fuiste sin pudor envejeciendo,
sin ver que calle abajo amanecía,
durmiendo cuando el sol anuncia el día,
sin darle a tus arrugas un remiendo.

En torno a tu carnal Encarnación
afamadas leyendas compulsadas
dejaron tu empedrado sin pisadas
y huérfana de notas tu canción.

Tu atalaya se hunde en los recuerdos
con los años que van a la deriva,
cercando de progreso tu cautiva
historia de alocados y de cuerdos.

Ahora quedan tus casas desvalidas
cargadas de pobreza consagrada,
allá donde la historia queda en nada
sabiéndose rescoldo de otras vidas.

Y yaces cual enfermo desahuciado,
sufriendo la constancia de los días,
soñando a tenor de las porfías
volver al esplendor de tu pasado.


Javier Feijóo
Del libro: "Ocurrencias".
º