PRÓLOGO
Hablar de Sergio Román es hablar de pasión
por el teatro y la poesía. Su formación en las distintas
disciplinas de Interpretación, Dramaturgia y Dirección Escénica, y
su participación en numerosos montajes nacionales e internacionales,
le hacen acreedor de un curriculum envidiable, con una capacidad
indiscutible para la creación artística y para su ejecución sobre
los escenarios.
Tuve la suerte de conocerlo en al año 2009
cuando montábamos en Badajoz la obra “Las brujas”, del autor
extremeño Luis Chamizo, que representamos en más de una treinta de
ciudades de la geografía nacional. A partir de ese momento hemos
compartido escenario en multitud de ocasiones, muchas de ellas
interpretando a personajes de algunas de sus obras de teatro, y,
otras muchas, compartiendo versos en tertulias y recitales de muy
diversa índole. Tantos kilómetros juntos a nuestras espaldas y
tantas horas interactuando sobre los escenarios hizo surgir entre
ambos una entrañable y gratificante amistad dentro y fuera de las
tablas.
Y mucho teatro y mucha poesía es lo que
contiene este libro que ahora tiene el lector entre sus manos. Seis
obras cargadas de idiosincrasia costera gaditana, con ese aroma
andaluz inconfundible que nos trasporta a la Andalucía más humilde,
profunda y arraigada.
Y ahora hablemos un poco de ellas:
LA
AURORA DE BARBATE es,
sin lugar a dudas, una magnífica semblanza de los habitantes de esa
localidad gaditana. El cotidiano devenir del pueblo con sus mercados
y habladurías, su ancestral tradición marinera inyectada en el
tuétano de sus hombres y mujeres, las reivindicaciones de los
pescadores frente a las medidas legistativas impuestas desde otras
latitudes y el tráfico de la droga en el Estrecho, configuran el
escenario donde se urde el drama amoroso de Mario y Carmen. Y de
fondo, la tragedia del naufragio del Nuevo Pepita Aurora el
5 de septiembre de 2007, a 7,8 millas de Punta Camarinal, en Tarifa,
cuando regresaba de faenar en aguas de Larache (Marruecos). Es
para mí un gran honor formar parte de su elenco dando vida al
personaje de D. Cristóbal, el armador.
Con
PATATÚN
Sergio Román nos transporta al puerto viejo de Barbate, donde los
protagonitas, padre e hijo, ambos marineros, nos desvelan los
misterios del atún, su pesca con la técnica de la almadraba
(palabra árabe que significa “lugar
donde se pelea o lucha”),
la pericia con el cuchillo para el despiece (el ronqueo) y las muy
diversas maneras de cocinar al “bicho”
para su disfrute gastronómico. Todo ello concentrado en un jocoso
diálogo propio de los hombres de la mar, con acento gaditano,
evocador de historias y enseñanzas de sus antepasados.
LA
LEVA
nos sitúa en las playas de Caños de Meca el 21 de octubre de 1805,
fecha en la que tuvo lugar la famosa batalla de Trafalgar, con la
armada británica y sus aliados -Austria, Rusia, Nápoles y Suecia-
al mando del vicealmirante Horatio Nelson, frente a la armada
franco-española al mando del vicealmirante francés Pierre
Villeneuve y el teniente-general español Federico Gravina. Los
humildes lugareños, protagonistas de la obra, narran con horror los
pormenores del forzado embarque de sus familiares (la leva) y la
cruenta batalla que presencian desde la orilla. La obra es, en sí
misma, una crítica mordaz a los enfrentamientos bélicos que
desencadenan las ansias de poder y gloria de los gobernantes.
En
LAS
ESTRECHAS,
Carmen y Fátima, desde uno y otro lado del Estrecho de Gibraltar,
parecen conversar desde la distancia mientras desmenuzan sus
sentimientos. Una, esposa de marinero desparecido mientras faenaba,
y, la otra, madre de joven embarcado en una patera de la que nadie
tiene noticias. Dramas simultáneos y cotidianos que se padecen en
las costas de Cádiz y Marruecos sin visos de solución.
EL
TARAF
es para mí, sin duda alguna, una auténtica obra de arte. Combina
todo el maravilloso espectáculo del flamenco con la fascinante magia
del teatro, creando un espacio dramático cargado de fantasía en una
mágnifica recreación de la famosa leyenda clásica alemana Fausto.
“El
espina”, protagonista de la obra, quiere ser bailaor y negocia su
alma con el espíritu del flamenco. También en esta obra tuve el
honor de participar representando a ese personaje de El Taraf.
EL
MANCO ILUSTRE es
un personaje de ficción, aunque bien pudiera haber existido en
realidad. A modo de entrevista distendida y jovial por parte de una
supuesta periodista, “Sánchez”, íntimo amigo del protagonista
de la historia, va narrando la fascinante vida del personaje, experto
almadrabero barbateño, hasta que consigue crear una cooperativa que
satisface a todos los marineros que se dedican a la pesca del atún,
alcanzando el respeto y la admiración de las más altas instancias
de la sociedad.
Estas son las seis obras englobadas en este
volumen, todas ellas estrenadas y representadas en numerosos
escenarios con notable éxito de público y crítica, en las que
conviven la ficción y las verdades como puños. Un teatro con un
marcado fondo social y reivindicativo que muy pocos autores consiguen
transmitir con la vehemencia y contundencia de Sergio Román.
Javier Feijóo
Mayo de 2020