19/8/19

A fuerza de vivir...











A fuerza de vivir, año tras año,
confirmo la certeza en tantas cosas…
¡Qué poco dura el aura de las rosas!
Nadie es dueño perenne de su escaño.

El tiempo cada vez es más tacaño,
las canas, atrevidas, caprichosas
y las arrugas siempre pudorosas.
Del nicho… ¿acaso importa su tamaño?

A fuerza de vivir quemo mi vida
girando sin parar, a fuego lento,
sobre este tiempo en ascuas, chamuscando

mi estancia en este mundo. Y consabida
es la fuerza brutal de ese cruel viento
que a fuerza de soplar la va apagando.

Javier Feijóo



º