La poesía ni se compra ni se vende
En tos laos van y me icen,
mu curiosos,
que por qué jago mis rimas
en castúo,
yo cavilo qu’es que a veces
m’adecúo
y mis versos se jilvanan mu
jonrosos.
No arrebusco los palabros
más rimosos,
ni m’enreo por las ramas,
sólo actúo,
y es que a veces soy asín de
cojonúo
y enjareto argunos versos
primorosos.
Sólo asina este soneto tié
sentío,
quieo icir que sólo asina se
comprende
porque asina lo ventila mi
albedrío.
La poesía ni se compra ni se
vende,
porque naide ve mercaos en
este lío,
y el castúo ni s’enseña ni
s’aprende.
Javier Feijóo
<< Home